jueves, 28 de agosto de 2008

Claudia Polanco



Cuando yo tenia unos 15 años ella era ademas de mi mejor amiga, la niña que me tenia suspirando de Lunes a Domingo. Tu sabes, amores adolescentes, de esos tan ricos, llenos de cosquillas estomacales.
Su mama que se llamaba Maria eugenia se daba cuenta de mi sentimiento y constantemente trataba, de maneras muy sutiles y poco efectivas, de mostrarme que esa relacion nunca prosperaria mas alla de una muy buena amistad, misma con la que termine un par de años despues.
En uno de tantos intentos, Malú, que no era una excelsa escritora, pero que era una maravillosa persona, se acerco a mi y abriendo una pequeña libretita hizo una copia de uno de sus poemas y me lo regaló.
Haciendo gala de mi memoria en un intento por recordar aquel documento y aunque ya pasaron mas de veinte años, quisiera plasmarlo hoy en mi Blog, estando seguro de que si por un lado su fidelidad debe ser del 99%, su mensaje esta perfectamente intacto.

Hoy tiré al agua algo que siempre me estorbaba,
vi cuando en fuerte cauce, flotando ella se quejaba.
¿Valdra la pena recordarlo?
¿Seguro estoy de lo que hice?
Si en fragmentos se iba deshaciendo
La culpa no fue mia,
la lucha es esteril triste,
No vale conformarse con tan poco
Es mas, casi olvidaba, era inservible.
si alguna vez, lleno los momentos,
albergando ilusiones vanas
...


Malú Rodriguez


... Asi exactamente funciona el amor bisiesto.