Ayer sujetó su mirada al infinito
con delicadeza, maniató la pesadumbre
y el aburrimiento fatuo.
Tan cerca de los sueños, tan lejos del tiempo
tan al sur, tan distante
como los barcos que a la distancia
iluminan su cielo...
... al horizonte.
Oda al tiempo que perdura.
Oda al tiempo que perdura.